Siempre ha mantenido que el Surrealismo no tiene porqué ir siempre unido a las artes como la pintura, música o literatura, sino que nos lo podemos encontrar en la vida diaria cuando a través de la estética se busca la sorpresa y sensaciones especiales cercanas a la añoranza y la melancolía.
Estas sensaciones, yo siempre las percibo en el estómago. Es por esto que la cocina a veces se puede acercar al Surrealismo.
Para mí el restaurante "El Bulli" de Ferrán Adriá ha sido un Templo del Surrealismo. Allí se busca producir sensaciones en los comensales a través de creaciones originales y extrañas, es decir, nunca imaginadas. Además lo hacen utilizando los cinco sentidos ya que no sólo interviene el gusto y el olfato como normalmente, sino también la vista por el colorido de sus platos, el tacto por sus diversas texturas y el oido por el sonido y la música que estoy seguro que acompaña las cenas.
Todo esto es algo "conceptual" como dice Ferrán, algo diferente que consigue sorprender al cliente y transmitirle sensaciones únicas. Y yo creo que lo consiguen.
Soy un gran admirador de Ferrán Adriá y su concepto de cocina.
Para una persona como yo, al que le gusta el Surrealismo, sería uno de los placeres más grandes cenar una noche en "El Bulli" y disfrutar de toda esa orgía de sensaciones y emociones.
Además trabajar en un centro de creación como ese debe ser también lo más grande. Lo digo como persona pero también como Químico que soy y conocedor y amante de los procesos de transformación de los alimentos.
Nada. Aquí queda dicho: que no podía dejar de homenajear y mostrar mi admiración por "El Bulli" al que deseo una pronta apertura.
A continuación os dejo una serie de platos que ha ofrecido este restaurante para delicia de los amantes del surrealismo. Dejaos llevar por vuestra imaginación para "saborear" estas creaciones originales que mezclan colores, texturas, olores y por supuesto gusto. El sonido lo aporta la poética de su nombre.
Un saludo y a disfrutar del menú
Chip de aceite de oliva
Aceitunas verdes sféricas
Aire helado de parmesano con muesli
Blini de yogurt
Brotes de pino
Cacahuetes miméticos
Caja de chocolates
Capuchino de caza
Cañas de mojito y caipirinha
Cerillas de soja
Ceviche de almeja
Coca de vidre
Crema de caviar con caviar de avellana
Empanadilla de Nori
Flauta de mojito y manzana
Gazpacho de ajoblanco
Globo de gorgonzola
Ninyoyaki de liebre
Papel de flores
Pollo al curry
Porra de parmesano
Rosa de manzana
Tagliatelle de consomé a la carbonara
Tartár de tuétano
Won-Ton de rosas con jamón y agua de melón
Corteza de bacalao
Galleta de tomate
EMPACHO DE SENSACIONES
CARPE DIEM