sábado, 31 de agosto de 2013

Al Borde del Abismo

Estos son los días más tristes de mi vida. Yo, que soy amante de la melancolía, presiento que ya tendré alimento para mucho tiempo...

Hoy siento cómo mi mundo se hunde y no puedo hacer nada. No sé que habrá después. Pero sé que me quedaré un arlequín sin cabeza ahogado en un mar de tristeza.




CARPE DIEM (vosotros que podéis)

Confío en poder compartir cosas que merezcan la pena con vosotros no demasiado tarde.




2 comentarios:

  1. "Este mundo es una comedia para aquellos que piensan y una tragedia para los que sienten"La razon nos puede servir para amortiguar el dolor,pero este siempre sobrepasará a aquella.Los Grandes Dolores sólo pueden ser superados y -creo- no del todo con pacientes "ejercicios mentales"como los ejercicios de los misticos para lograr la beatitud.Aunque a veces sintamos un extraño placer en sumergirnos en la tristeza,creo que nuestro objetivo deberia ser la alegria,la tranquilidad de ánimo,la paz del alma.No la felicidad mundana que con su inconsistencia se nos presenta como irreal,sino aquella otra que no puede ser afectada por los acontencimientos externos porque nace de nuestro interior.Ardua será la tarea de emplearse en buscar aquella,pero sin duda merecerá la pena,pues ha de ser el màs precioso tesoro que subyace en el interior de cada ser.Carpe Diem(tú tambien puedes)

    ResponderEliminar
  2. Preciosas palabras, Blanca. Te agradezco mucho tu apoyo.
    Tienes mucha razón en que la vida, a veces, puede ser una tragedia para los que sienten, para los románticos, para los sensibles...
    Sin embargo, es finalmente la razón la que nos puede salvar de caer en el abismo.
    Razonar las cosas es bueno aunque hay sentimientos que nunca vamos a poder razonar. Esos que nos hacen sentirnos diferentes y felices "como niños cuando salen de la escuela" (qué verdad cantaba Serrat).
    Carpe Diem.
    Creo que pronto volveré a escribir de nuevo. ( a quien pueda interesar )

    ResponderEliminar